El partido del pasado domingo en Fuente Palmera, me dejó un sabor agridulce. Agrio por el resultado y el juego desarrollado en la primera parte y dulce, por que nuestros pequeños lo dieron todo, en la segunda parte, yo creo que con tal de comerse en una hamburguesa en Macdonalds (Promesa hecha en el descanso si conseguían remontar.
En la primera parte se vio un equipo de La Victoria un poco lento, que tubo que defender mucho, sobre todo por las bandas, donde los extremos rivales corrían rapidísimo y se internaron hasta conseguir meter cuatro goles a nuestro guardameta, dicso sea de paso en las cuatro ocasiones que llegaron claras. Rubén metió un golazo por la escuadra del portero rival, llegando al descanso con el Resultado de 4-1
El segundo tiempo, y tras la promesa hecha por parte de la afición de una invitación a comer huevos fritos, (invitación que declinaron ellos mismos por otra al Macdonalds), a cambio de una remontada, parecen que todos se pusieron las pilas, y Rubén corrió más que los conejitos de duracell, consiguiendo meter dos goles más.
Resultado: Fuente Palmera 4-1 La Victoria C.F.
Como digo el partido dejó un sabor agridulce, tras una primera parte que hacía presagiar una goleada, nuetros benajamines se pusieron el mono de trabajo y con el tesón que nos tiene acostumbrados y la fuerza y coraje de Rubén consiguieron un resultado más que digno, incluso escaso teniendo en cuenta que uno de nuestros tiros fue a puerta.
Mencionar también que Juan Carlos e Ismael salieron tocados, cosa leve espero.
Último apunte:
Casi al final del partido se vió por parte de algunos de la afición local comportamiento fuera de lugar y recriminaciones al arbitro. Hay que entender que aunque jueguen nuestros hijos y le hagan falta, que el arbitro pite falta en contra de uno de nuestros hijos, y que incluso lo siente en el banquillo unos minutos, no es excusa para perder los papeles por un simple juego, que ni nos da de comer a nosotros, y a lo mejor no se lo dará a nuestros hijos. Estos están jugando para aprender, y no beneficia en absoluto que un padre discuta las decisiones arbitrales, y menos de esa manera, por que así lo unico que aprenderán es a no respetar las normas ni a los que la interpretan. Sinceramente espero no ver más esas actitudes en un campo de fútbol, por descontado y habiendo visto ya a varios partidos sé que los padres que van a ver a sus hijos en nuestro equipo no tienen ese comportamiento.
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